El calentamiento global que le afecta al Perú y a nuestra madre tierra es uno de los problemas más preocupantes, por ello el pasado 19 de setiembre se ha realizado un conversatorio en el Auditorio San Agustín de Chulucanas denominado “Nuestro compromiso por el cuidado de los bienes de la creación” dirigido por la sociedad misionera de San Columbano.
Sean McDonagh, es el presidente de Greenpeace de Irlanda y en los últimos tiempos ha sido el coordinador central para la justicia, paz e integridad de la creación para el “Columban misioneros”. Al no hablar castellano Noel Kerins hizo de traductor durante el conversatorio y la conferencia de prensas ofrecidas en la ciudad de Chulucanas.
En Perú se vienen realizando 3 conferencias en las ciudades de Huancayo (La oroya), Lima y Piura (Chulucanas). “Escogimos Chulucanas por el trabajo que se viene realizando en defensa del medio ambiente en relación con la minera Majaz hoy denominada Río Blanco Copper S.A. y porque el efecto de precaución es primero” señaló Rebeca Yarnold, directora del Centro de Estudios Misioneros de San Columbano - Lima.
“Por bueno que fuese un proyecto minero no dura por siempre”
“El Perú está viviendo una situación similar a la de Suecia de los años 60 y debemos tener primero información constatada científicamente y va depender bajo que condiciones de haga la minería”, manifestó McDonagh y por bueno que fuese un proyecto minero no dura por siempre y crea efectos tóxicos que cuestan millones de años, vidas humanas y dólares en reconstruir. Por ejemplo en la Oroya es lamentable ver niños con más de tres veces la cantidad de plomo y más de dos veces el nivel permitido de Cadmio en la sangre y esto está afectando la salud de toda la población.
El Perú admite actividades mineras mientras que Chile las rechaza manifiesta Kerins. Ellos cuidan a los suyos ¿Por qué no hacemos lo mismo nosotros acá? El Perú es un país bendecido por la gran biodiversidad existente por lo que es `posible construir un modelo de desarrollo, ya que no existe otro lugar, ni siquiera Europa similar al Perú, dijo Kerins traduciendo a McDonagh.
Como se sabe la sierra de Piura no posee nevados por encontrase en la parte más baja de la cordillera de los andes del Perú, Sin embargo el agua proveniente de estas partes altas se origina gracias al ecosistema natural denominado por algunos científicos como Páramo Andino, el cual capta y almacena el agua que se encuentra en forma de niebla en el ambiente, para luego discurrirla a las partes bajas de la cuenca. No existe una conciencia del origen del agua en la ciudad de Piura. ¿De dónde viene el agua?, de la parte alta; los que están en la parte alta son los verdaderos guardianes de estos recursos y la industria minera consume más agua y depreda todos los sistemas bióticos que se encuentran en la zona y todo lo que pase arriba afectara las partes bajas.
Comunidades piuranas interesadas en el cuidado del medio ambiente
“Debemos promover el respeto a la dignidad humana porque nuestra responsabilidad está alli. Somos responsables de heredar lo heredado por nosotros por lo que debemos admitir errores y mostrar solidaridad con la tierra que corre en peligro”, expresó Martín Vidal del Área de Justicia y Paz de Chulucanas durante el conversatorio.
Dicho evento convocó a las comunidades altopiuranas de Chalaco, Santo Domingo, Huancabamba, Frías, Ayabaca y Chulucanas. Asimismo fueron partícipes alumnos de las instituciones educativas de Chulucanas. Aquí se expresa la necesidad que nos cabe a los mortales de proteger la capa de ozono, porque su reducción excesiva generará incremento de cánceres a la piel, cataratas y con ello ceguera; pero además el daño a la misma trae consigo una menor productividad de las plantas y daño a la fauna; pérdida de inmunidad a las enfermedades; y distintos efectos adversos. Pues está comprobado que al haber menos ozono, hay mayor radiación ultravioleta y mayor cantidad de enfermedades a la piel, vista y algunas quemaduras más severas.
McDonagh explicó que el calentamiento global es una de las consecuencias del cambio climático, y genera que se derritan los glaciares, así como todas las superficies sólidas del globo terrestre, y el cambio de comportamientos climáticos. Hizo ver que el año 2006 se registró un récord respecto al agujero del ozono sobre la Antártida, abarcando una superficie de 30 millones de kilómetros cuadrados, casi sobre la totalidad del área de la Antártida, lo cual generó la alarmante pérdida de 40 millones de toneladas de ozono. Para el presente año se afirma que nuevamente estará presente el agujero de la capa de ozono sobre la Antártida, pero los científicos estiman que la pérdida será en proporciones menores respecto al 2006. Por ello debería preocuparnos.
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